miércoles, 1 de febrero de 2012

Y al final siempre pagan los trabajadores...



Hasta ahora, durante todos los años de crisis que han transcurrido, se ha vivido una crisis financiera, que ha afectado, principalmente, al motor de la economía española, la construcción. Pero, día tras día, se puede observar como no se realiza ninguna reforma en el sector causante de la crisis, sino que las reformas que se realizan o se van a realizar, únicamente afectan a los trabajadores y a los pequeños consumidores.

El inicio de la crisis financiera fue una oportunidad (y lo sigue siendo), para realizar reformas en el ámbito financiero, para que no se pudieran volver a producir los excesos llevados a cabo en los años anteriores a la crisis. Las reformas financieras, deberían haber sido para regular un sector que tiene total libertad para jugar con los ahorros de los pequeños inversores, y a la vez, atacar cualquier otra economía o empresa. Pero, aunque todos los Gobiernos europeos tuvieron buenas intenciones, a día de hoy no se ha producido ninguna reforma. Lo más cercano que se está produciendo es la denominada “tasa Tobin” que se quiere imponer en Francia, que consiste en una tasa sobre las transacciones financieras. Por algo se ha de empezar, no?

Por otra parte, las únicas reformas que se han realizado y se van a realizar, son de ámbito fiscal y laboral, algo que siempre afecta a los trabajadores y a las rentas más bajas. Por ejemplo, en referencia a las reformas fiscales, además de aumentar el IRPF, se recuperó el Impuesto del Patrimonio, pero en Valencia se ha derogado. Y esto resulta un tanto incomprensible, un impuesto que puede conseguir más de 100 millones al año, como puede ser derogado? Muy fácil, porque únicamente afecta a las rentas altas. En cambio, el IRPF, que afecta a todo tipo de rentas, se mantiene.

De la reforma laboral que hay en camino poco se puede decir, porque nadie se ha pronunciado sobre la misma. Lo único que se ha podido observar es una tibia “sonrisilla” del Presidente Rajoy, cuando analizaba su “desliz”, en el que afirmó que, la citada reforma, le “va a costar una huelga general”. Lo único que se puede comentar, es que, con este anticipo del Presidente, se puede vislumbrar una reforma bastante dura con los trabajadores, que son los que siempre pagan las malas decisiones que se han ido tomando en la política, y que, en este caso, han conducido al país hasta la situación actual.


Lo que sí que debería hacer el Gobierno, es darse prisa por realizar esta reforma laboral, ya que si piensan que puede mejorar la contratación, lo que están haciendo es retrasarla. Ya que, ¿que empresario va a contratar ahora, si sabe que dentro de un mes va a ser más barato? Aunque pensándolo bien, si este modelo laboral está en España desde hace mucho tiempo, ¿porqué hace 8 años se contrataba tanto, y ahora nada? Si el modelo laboral es el mismo, ¿la reforma solucionará algo?

Al fin y al cabo, lo que se ha aprendido de los tiempos duros es que, los individuos y organizaciones que han traído una crisis mundial, no se ven afectados por ningún tipo de medida o reforma, siguen viviendo como antes de la crisis, o mejor. En cambio, las reformas que se han producido y otras que vienen en camino, únicamente afectan a los ciudadanos de siempre, ya que parece, que no tienen poder para cambiar nada, ni para decidir. Aunque todo esto habrá que verlo…

No hay comentarios:

Publicar un comentario